Si lloras porque se ha puesto el sol, las lágrimas no te dejerán ver las estrellas

domingo, 28 de noviembre de 2010

El pájaro y el Cazador

Huye el pájaro del cazador. Vuela lejos, devuelta hacia su casa. 
Escapa de una muerte, de un destino predestinado.
Que iluso el pájaro que cree que puede escapar de las garras del cazador.
Que iluso el cazador al creer que puede cazar a un pájaro de tan lejos.
Mira el cazador hacia arriba midiendo la distancia que lo separa de su presa.
Mira para atrás el pájaro calculando que tan lejos podrá llegar.
Se oye un gruñido del cazador, que tiene que volver a cargar el arma.
Se oye un gruñido del pájaro que siente como su cazador se prepara.
Se escucha un sonido, que corta el aire y lastima los oídos.
El cazador ve como la bala sale disparada hacia el pájaro.
El pájaro ve atrás como su nota de muerte lo va alcanzando.
Entonces el cazador ve con satisfacción como la bala alcanza al pájaro, y este cae rápidamente hacia el suelo.
Entonces el pájaro ve como por poco pudo esquivar el arma mortífera de su cazador.
El cazador se acerca a su presa y ve una alondra muerta en el piso.
El pájaro, un alegre ruiseñor, ve atrás suyo como las garras del águila casi lo agarran.
El cazador mira hacia arriba y ve como un ruiseñor esquiva a un águila. "Esto solo se ve una vez" piensa.
El pájaro mira hacia abajo y ve como un cazador se lleva a una alondra. "Ya no adevertirá más a los amados" piensa.




No hay comentarios:

Publicar un comentario